Mi punto de vista de «Cruising»: una propuesta teatral innovadora y provocativa

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Mi crítica sobre Cruising, el espectáculo que se presenta en Teatro Porteño

Bajar las escaleras para ingresar al teatro Porteño en plena Calle Corrientes y empezar a descubrir el mundo de Cruising, fue una experiencia teatral que me cautivó como espectador. Pocas veces un periodista se relaja para disfrutar verdaderamente del arte, muy bien lograda en este caso, desde un esfuerzo enorme del trabajo en equipo.

Con una mirada, desde el director hasta los actores, bastante provocadora, rompiendo esquemas y produciendo en el público el asombro constante. Divertida, quizás no apta para todas las personas, solo para espectadores con cabezas abiertas o con ganas de abrir sus cabezas.

En Cruising los prejuicios desaparecen, mostrando el mundo homosexual, no tan diferente al hetero, interpretado por actores que quizás no vivieron tal experiencia pero que gozan de cada escena y se lucen en los distintos cuadros.

Es una obra donde todos tienen la posibilidad de brillar y hacer reír desde sus personajes. Con una historia concreta, entendible, donde se inicia, se desarrolla y finaliza claramente. Los roles están muy bien divididos y el camino que recorre el espectador es curioso, dinámico, divertido y cuando viene un golpe bajo, por una historia en particular, la descontractura aparece para levantar el ánimo.

Me da la sensación que todos ingresan a la sala tímidos, mirando todo lo que pasa alrededor, ya que es un espectáculo que empieza desde la previa al ingreso del público, y luego se retiran con una sonrisa, recordando grandes momentos de la historia. Me gustaría ver en el interior del país esta obra, quizás ayudaría a entender a la sociedad muchas cosas comunes que no todos están dispuestos a ver…

Me gustó, la recomiendo… y mucho!

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